¿Cómo se puede vivir con más tranquilidad cuando se tiene imperfecciones y se intenta convivir con los granos? Tanto si te sometes a una terapia como si no lo haces, el maquillaje es una de las soluciones, siempre y cuando elijas
el tipo adecuado. De lo contrario, podría empeorar tus brotes. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo seleccionar y aplicar el maquillaje correctamente.
Los cambios hormonales, la herencia genética, una dieta demasiado rica en azúcares, el estrés… Estas son las principales causas de la aparición de brotes en los adolescentes (chicos
y chicas por igual), y de su persistencia o reaparición en muchas mujeres en la edad adulta.
Los brotes no suelen ser bienvenidos en ningún momento de la vida. El maquillaje es una forma de reducir la apariencia de los granos y hacer más fácil convivir con las miradas de los demás.
También es una forma de resistir la tentación de tocarlos durante el día. Si están camuflados, tenemos menos tentación de apretarlos.
Esto se puede lograr siempre que elijas bien el maquillaje, ya que un maquillaje inadecuado puede empeorar los brotes. Esto se debe a que, por ejemplo, puede ser comedogénico (es decir, que favorece la formación
de granos). También porque, a veces, nos olvidamos de desmaquillarnos y de limpiar las esponjas y las brochas, donde luego proliferan las bacterias.
Prepara tu piel antes de aplicar el maquillaje para brotes
Limpia tu piel propensa a las imperfecciones
La limpieza de la piel al levantarse es un paso que no debe omitirse, ya que es importante deshacerse del sebo producido durante la noche. Si tu piel es grasa, tienes una opción: el agua micelar o un gel limpiador
suave y sin jabón. Elige la fórmula que te resulte más cómoda. Si tu piel está seca por la terapia prescrita por el dermatólogo, elige una crema limpiadora calmante formulada
para piel con tendencia a los brotes.
Tratar e hidratar la piel propensa a los brotes
A continuación, aplica la terapia local o dirigida, si tienes una, o tu crema hidratante directamente. De nuevo, la elección del producto es importante y depende de tu tipo de piel. Si tu piel propensa
a los brotes tiende a ser grasa, elige una emulsión suave y no grasa que contenga microcápsulas absorbentes para hidratar y matificar la piel; si estás con una terapia dermatológica secante,
es mejor una crema nutritiva y calmante. En todos los casos, debe ser no comedogénico y para piel con imperfecciones.
Desde que decidí cuidar mi piel y desmaquillarme cada noche, mis problemas cutáneos han disminuido mucho; mi cutis es más luminoso y uso menos maquillaje.
Elise
De leve a moderado o grave, cada tipo de brote tiene su propia composición
¡Eso es! Estás lista para aplicar tu maquillaje. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo maquillarte según la gravedad de tus brotes. El objetivo es disimular los granos y las marcas y emparejar la tez.
Brotes leves a moderados
Para disimular tus pequeños granos, aborda tus imperfecciones con un lápiz corrector beige. Utiliza un hisopo de algodón para difuminar los bordes del corrector sin riesgo de que se
borre. Consejo: para conseguir una tez más uniforme y disimular los poros dilatados, puedes empezar con una base de maquillaje líquida por todo el rostro y dar pequeños toques con
una esponja.
Brotes graves
Para comenzar, aplica un toque de corrector en barra sobre la imperfección: verde para los granos rojos, amarillo cuando son morados (común en la piel clara), coral en las marcas que se
vuelven marrones. Date golpecitos hasta que el color se vuelva gris. Para igualar tu cutis, usa una base de maquillaje compacta con una esponja. Dale una palmadita en la parte superior del corrector
para que no se mueva. Para un acabado fino en el resto del rostro, alisa hacia los bordes. Termina con la aplicación de un polvo translúcido.
ASESORAMIENTO AMABLE (Y EXPERTO)
Para realzar tu rostro y perfeccionar tus rasgos, no olvides el toque final.
Solo queda fijar el maquillaje y matificar la piel con un velo de polvo translúcido. Aplícalo por todo el rostro desde los contornos y avanza hacia el centro del rostro para obtener un resultado más
liviano y evitar acentuar la textura de los granos. Y para esculpir el rostro, nada como un toque de bronceador o iluminador en los pómulos.
Pero, para que tu maquillaje dure más tiempo sin agregar una capa extra, rocía una fina bruma de agua termal en tu rostro. No te olvides de limpiar bien la esponja y la brocha. ¿Por qué?
Para evitar que las impurezas que quedan en los utensilios de maquillaje se depositen en tu piel y formen nuevos granos la próxima vez que los uses.
Los gestos adecuados para el maquillaje de brotes
No todos los productos de maquillaje son iguales cuando se trata de corregir, igualar y mejorar la tez. Para cubrir las imperfecciones sin sofocar la piel y provocar la aparición de nuevos granos, lo
más seguro es elegir un maquillaje corrector médico especialmente formulado para tu tipo de piel y no comedogénico. Se puede encontrar en farmacias y tiendas de belleza.
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